El sector gastronómico es considerado como una amplia cadena de valor que se apoya sobre cuatro grandes pilares los cuales tienen un peso importante en el conjunto de nuestra economía:

  • Agricultura, ganadería y pesca
  • Industria de la alimentación y bebidas
  • Comercio al por mayor y por menor de alimentos y bebidas
  • Servicios de alojamiento y de comida y bebida

Según datos del Instituto Nacional de Estadística, dichos pilares aportan más de 380.000 millones de euros al tejido productivo y 168.000 millones de euros de Valor Añadido Bruto, lo que representa un 33% y un 14% del PIB, respectivamente.

Además, más de 3 millones de personas trabajan en el sector, lo cual supone un 18% del total del empleo español.