Según un reciente estudio publicado por el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) del Instituto de Productos Naturales y Agrobiología de Tenerife revela que utilizando una crema de ingestión oral a base de yema de huevo con anticuerpos contra el Covid-19 podría evitar que nos contagiáramos cuando no utilicemos mascarilla. La investigación ha pasado ya por diferentes fases y las últimas pruebas realizadas demuestran que su eficacia permite que los anticuerpos permanezcan en la boca durante dos horas.

Tras varios años estudiando el comportamiento de anticuerpos desarrollados en gallinas, el CSIC revela que cuando una gallina es inmunizada, concentra los anticuerpos en la yema del huevo, un alimento natural que se puede ingerir por vía oral puesto que estos anticuerpos no pasan a la sangre.

Utilizando estos anticuerpos frente a unas regiones críticas de las proteínas del virus, resultan ser unos buenos protectores. Al utilizarlos en la cavidad oral proporcionarían una protección al impedir que el virus se adhiera a nuestras células.

Los últimos tests han probado la capacidad bloqueante de los anticuerpos en la unión del virus a su receptor humano. Además, en las muestras tomadas de saliva tras la ingesta de la pomada demuestran que los anticuerpos permanecen al menos dos horas en la saliva.

Según revela el estudio, la utilización de esta pomada dispersa gradualmente anticuerpos por la cavidad oral y continúa diseminándolos a su paso por la faringe y el esófago. Si el virus entra en el organismo los anticuerpos lo atraparán y rodearán impidiendo la infección. El virus es arrastrado hacia el estómago, donde los jugos gástricos lo destruirán.

Respaldado por el Cabildo de Tenerife, el estudio tendría su aplicación gastronómica de la que se ha encargado el chef Diego Schattenhofer (1973 Taste), quien ya ha elaborado “pomadas gastronómicas y salsas” que incorporaría a sus platos en cuanto reciba la autorización de las autoridades sanitarias competentes. Platos como el gofio, el guarapo y los almidones hidrolizados que contribuirían a que se peguen los anticuerpos a la garganta. Tan sólo medio gramo de estas cremas serían más que suficiente para generar inmunidad de dos horas frente a la COVID-19.

Sin duda, inmensas son las posibilidades gastronómicas de esta pomada que nos podría proteger frente a la pandemia.